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Pensemos por qué la gente es tan reacia a sentarse y estudiar. Un obstáculo obvio para el estudio efectivo es la falta de motivación, la cual puede deberse a numerosas causas.
El sólo pensar en la cantidad de material que se debe abordar resulta abrumador.
El tiempo extra y la concentración requeridos para la tarea son difíciles de ubicar en nuestra apretada agenda.
Retener información, para la mayoría de la gente, significa un esfuerzo sostenido de releer una y otra vez, lo cual resulta aburrido.
Leer y memorizar palabras de una página no es ni la mejor manera ni la más natural para procesar y recordar información.
Reducir el estudio a proporciones adecuadas
Releer constantemente el material y preparar exámenes dos veces por semana produce una presión que puede hacer que la mente entre en pánico y se cierre. ¿Cómo puede un estudiante, él o ella, saber cómo priorizar lo que estudia?
Puede resultar lógico suponer que si un estudiante se compromete a hacer un repaso nocturno, estudiar para exámenes dos veces por semana puede resultar fácil, puesto que casi todo el material ya habrá sido cubierto.
Sin embargo como los resultados de los exámenes son determinantes para saber si un alumno pasa o no de curso, resulta escencial prepararse bien para los exámenes.
Luchando contra la fatiga y la procrastinación
Trabaje todo el tiempo que decida dedicarle a cada curso, tema o exámen. Si sabe que su memoria reciente es deficitaria, no se apoye en estudiar intensamente la noche anterior al exámen. Asegúrese de dejarse un tiempo para el repaso todas las noches.
Planifique una agenda de estudios y márquela en su calendario. Después de haber señalado las fechas de los exámenes y los proyectos en un calendario, no será fácil salteárselos. Tomarse un tiempo para planear su trabajo de antemano pondrá de manifiesto cuánto tiempo real le llevará cada cosa y le permitirá organizarse y no postergar tareas.
Trate de distribuir el material según los diferentes tópicos y divídalo en partes. En vez de avizorar cada curso o tema vasto como una unidad monumental, divídalo en pequeñas unidades y estudie cada una de ellas por día o por semana, dependiendo de su agenda y de la cantidad de material que deberá cubrir.
Ejemplos de división de los tópicos de estudio
Nombre del curso: Conceptos de Judaísmo
Tópicos: Tefilá, brajot, shemitá, kashrut, etc.
Tópico 1: Shemitá
Partes en que se dividió: Shemitá en la Torá; peirushim en Shemitá, definición de los tiempos de Shemitá, halajot de frutos, halajot de vegetales, halajot de plantas y de flores.
Agenda: Lunes por la noche –shemitá en la Torá javrusá con Esti (media hora); Martes por la noche- hacer halajot de frutas (media hora).
Y así sucesivamente.
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